Crónica
Javier Divany Bárcenas
México 10 marzo
En una de las votaciones más libres realizadas en la Cámara de Diputados, sin críticas, ni prohibiciones, los legisladores de todos los partidos tuvieron la autoridad moral de dar su voto para, sí o no, en la legalización de la marihuana, pues el tablero electrónico de pintó de chile, mole y pozole los votos.
De los 316 votos a favor, 129 en contra y 23 abstenciones, los sufragios de Morena, todos a favor; PAN todos los diputados votaron en contra; PRI, dividido, pero la mayoría a favor; PT, dividido pero la mayoría a favor; PRD todos a favor, pero con algunas reservas; PES, dividido; PVEM, todos a favor y Movimiento Ciudadano todos a favor con sus reservas.
El diputado Marco Antonio Adame del PAN, que la Regulación de la Cannabis traerá graves consecuencias para la salud de los mexicanos, y tras argumentar en contra del dictamen que expide la citada ley, señaló de “errada” la sentencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que da origen a esta ley, ya que violó uno de los principios fundamentales de los derechos humanos y no siguió un proceso adecuado, respetando la interdependencia.
Abundó que el libre desarrollo de la personalidad es tan relativo que podía ser utilizado para justificar “cualquier aberración” y que esta que además hará más accesible la droga para los niños y adolescentes del país.
Se pronuncia Anita Sánchez en contra de criminalizar a consumidores de cannabis
Es necesario abandonar la visión prohibicionista forjada en tabúes sociales que han limitado el derecho al libre desarrollo de la personalidad, asevera la diputada de Morena
En su participación, la diputada Anita Sánchez Castro del partido Morena, se pronunció por el libre desarrollo de la personalidad y en contra de criminalizar a los consumidores y pequeños productores del cannabis.
«Es necesario que abandonemos esta visión prohibicionista forjada en tabúes sociales que han limitado el derecho al libre desarrollo de la personalidad», indicó.
La legisladora sostuvo que su prohibición no cumple con el objetivo de disminuir su comercialización clandestina, y planteó la necesidad de contar con mecanismos jurídicos que garanticen el pleno respeto de los derechos humanos.
Laura Rojas Hernández del PAN dijo que la nueva Ley no garantiza los derechos a los consumidores ni a la salud, además su diseño no generará derrama económica ni desarrollo.
Advirtió que no incluye una política de prevención y no tiene un diseño que proyecte una derrama económica y desarrollo en las comunidades donde se cultiva la marihuana.
Lamentó que los senadores hayan desaprovecho la oportunidad de diseñar un mejor modelo institucional y de política pública que regule integralmente el consumo del cannabis desde todos sus aspectos.
La diputada de Morena María de los Ángeles Huerta del Río, en su intervención hizo énfasis en proteger a los menores de 18 años y en garantizar la libertad a las personas adultas que consumen esta sustancia.
La diputada cuestionó “al combate fallido” contra el narcotráfico y la doble moral de la oposición sobre la regulación del cannabis y explicó que la propuesta repara el daño cometido en contra de las personas detenidas por la posesión de cannabis y reiteró que esta reforma abona a la pacificación del país.
El diputado Armando González Escoto (PES) solicitó que se ponderen las consecuencias de aprobar la Ley Federal para la Regulación del Cannabis para la juventud y la población susceptible de caer en adicciones
El legislador argumentó en contra del dictamen y señaló la importancia de considerar la adicción que esta sustancia psicoactiva causa por naturaleza en el ser humano.
Subrayó que legalizar en materia de cannabis y regular su consumo no se traducirá en una disminución significativa en la producción o en el control del narcotráfico y reiteró que el consumo frecuente de esta planta genera adicción; por ello, pidió tomar en cuenta la salud de las familias al aprobar esta ley.
Frinné Azuara Yarzábal (PRI) advirtió sobre los efectos nocivos del consumo del cannabis y el riesgo de su regulación, ya que se abre la puerta al uso de sustancias más adictivas y dañinas.
En tribuna, al fijar la postura dijo que México no está preparado para regular el uso del cannabis con fines lúdicos y que es una sustancia que puede generar dependencia y daños a la salud.
“Su consumo frecuente se asocia con graves problemas respiratorios, de salud mental, menor peso al nacer, deterioro en el aprendizaje, atención y memoria, accidentes automovilísticos y suicidios».
“La disponibilidad incrementará el uso de esta sustancia, sobre todo en los adolescentes y jóvenes que corren mayor riesgo y cuyo cerebro aún no se ha desarrollado por completo”, expresó.
Reconoció las buenas intenciones del dictamen; sin embargo, no se puede soslayar la opinión de los especialistas en la materia y de las experiencias en otros países que advierten sobre los graves peligros que conlleva a legalizar el uso lúdico del cannabis.